MOVIE REVIEW: “Borderlands” (2024)

Synopsis: An unlikely team (totally disorganized and made up of misfit members) joins forces to face a dangerous mission: saving a missing girl (who is the daughter of the most powerful creature in the universe), who holds the key to an unimaginable power that can change the course of history as we know it.

Just like movie adaptations based on comic books, movie adaptations based on video game titles seem to suffer from an unusual ailment: an acute lack of creativity. This becomes increasingly evident when projects like this receive a green light (and a big budget) from the big studios to be filmed, because it is more than obvious that there are extremely limiting factors within their respective narratives. Here is another classic example of how not to make cinema using video games as the basis of your material.

As “ironic” as all this may seem (even to me as I'm writing this review at this very moment), I believe that the worst part of this adaptation is not the story itself (which even has a few relatively small interesting points), but rather, what the writers decided to do with her. The plot does not contain any complex elements, so it was expected that the movie would be able to condense its narrative elements into a simple, but efficient development. However, that is not even remotely the case here. Everything is a mess.

Betting on an extremely chaotic and irritating approach, the story has a constantly unstable narrative (to the point of causing frustration in many moments), with poor decisions regarding its construction, as well as a very embarrassing essence, which will certainly manage to embarrass even the most faithful defenders of this game (because there are simply no arguments to defend what was done here). I really can't understand how something that already had a recipe ready to be a success becomes an almost instantaneous failure in another kind of media.

Parading a set of uncharismatic, one-dimensional characters with no chemistry with each other within a poorly written script, there's not much a cast can do. Not even names like Cate Blanchett and Jamie Lee Curtis were able to offer any decency to this project, which looks more like an explosion of lights and colors at a frenetic pace that at all times appeals to the nostalgic sense of the public who already know the game (as if the project begged for the attention of this more captive and perhaps more understandable audience).

In short, absolutely no one within this stellar cast manages to do anything worthy of being mentioned as a remotely good performance. Everything is shallow, artificial and worrying, that the only thing I can ask myself is how the running time of this project managed to reach 90 minutes. Full of genre clichés, the movie tries to create its own identity based on its own peculiarities, but everything is explored in the worst possible ways. Therefore, everything that can be seen on the screen is an extremely unsuccessful project... From start to finish.

Making a live-action movie requires meticulous work from everyone involved. It's not just about casting the best names within a cast to bring the characters to life, it's about writing their respective stories within a narrative that manages to be coherent with what is being constructed. Even getting elements such as the characterization of its characters right (which ends up being just a technical detail, but still important), the central damage lies in the subplots that should keep these characters standing and being relevant to this project.

Honestly, I have no doubt that choosing filmmaker Eli Roth (basically known for his movies with high doses of physical violence and bloodbath) was a bad decision. At no point does he manage to deliver a convincing vision (not even a partial one) about the project he had in hand. In addition to helping with writing the script, he also worked as a director here, and delivered one of the worst works of his career (so far). Roth didn't have the slightest sense of creativity to work on this project, which deserved something more decent.

Borderlands even manages to deliver some genuine entertainment here and there (more due to its technical aspect than its dull jokes), but everything is too repetitive to be seen as something bigger than it really is (and the movie's plot speaks for itself). In narrative terms, perhaps the most interesting thing is the dynamism of the project (which at times is very similar to the dynamism of the game), but even these moments are too generic to be remembered. A few drops of solidity in the middle of a very shallow sea.

Sinopsis: Un improbable equipo (totalmente desorganizado y formado por miembros inadaptados) une fuerzas para afrontar una peligrosa misión: salvar a una niña desaparecida (que es hija de la criatura más poderosa del universo), que posee la clave de un poder inimaginable. que puede cambiar el curso de la historia tal como la conocemos.

Al igual que las adaptaciones cinematográficas basadas en cómics, las adaptaciones cinematográficas basadas en títulos de videojuegos parecen sufrir una dolencia inusual: una aguda falta de creatividad. Esto se hace cada vez más evidente cuando proyectos como este reciben luz verde (y un gran presupuesto) por parte de los grandes estudios para ser filmados, porque es más que obvio que existen factores extremadamente limitantes dentro de sus respectivas narrativas. Aquí tienes otro ejemplo clásico de cómo no hacer cine utilizando los videojuegos como base de tu material.

Por más “irónico” que pueda parecer todo esto (incluso a mí que estoy escribiendo esta reseña en este mismo momento), creo que lo peor de esta adaptación no es la historia en sí (que incluso tiene algunos pequeños puntos relativamente interesantes), sino más bien, lo que los escritores decidieron hacer con ella. La trama no contiene elementos complejos, por lo que se esperaba que la película lograra condensar sus elementos narrativos en un desarrollo sencillo, pero eficiente. Sin embargo, ese no es ni remotamente el caso aquí. Todo es un desastre.

Apostando por un planteamiento sumamente caótico e irritante, la historia tiene una narrativa constantemente inestable (hasta el punto de causar frustración en muchos momentos), con malas decisiones en cuanto a su construcción, así como una esencia muy embarazosa, que seguramente logrará avergonzar incluso los más fieles defensores de este juego (porque simplemente no hay argumentos para defender lo hecho aquí). Realmente no puedo entender cómo algo que ya tenía una receta lista para ser un éxito se convierte en un fracaso casi instantáneo en outro tipo de medios.

Al exhibir un conjunto de personajes unidimensionales y poco carismáticos sin química entre ellos dentro de un guión mal escrito, no hay mucho que el elenco pueda hacer. Ni siquiera nombres como Cate Blanchett y Jamie Lee Curtis fueron capaces de ofrecer decoro a este proyecto, que parece más bien una explosión de luces y colores a un ritmo frenético que apela en todo momento al sentido nostálgico del público que ya conoce el juego (como si el proyecto pidiera la atención de esta audiencia más cautiva y quizás más comprensible).

En resumen, absolutamente nadie dentro de este elenco estelar logra hacer algo digno de ser mencionado como una actuación remotamente buena. Todo es superficial, artificial y preocupante, lo único que puedo preguntarme es cómo la duración de este proyecto logró llegar a los 90 minutos. Llena de clichés de género, la película intenta crear una identidad propia a partir de sus propias peculiaridades, pero todo se explora de la peor manera posible. Por tanto, todo lo que se puede ver en pantalla es un proyecto extremadamente fallido... De principio a fin.

Hacer una película de live-action requiere un trabajo meticuloso por parte de todos los involucrados. No se trata sólo de elegir los mejores nombres dentro de un elenco para darle vida a los personajes, se trata de escribir sus respectivas historias dentro de una narrativa que logre ser coherente con lo que se está construyendo. Incluso acertando en elementos como la caracterización de sus personajes (que termina siendo solo un detalle técnico, pero no deja de ser importante), el daño central radica en las subtramas que deberían mantener a estos personajes en pie y siendo relevantes para este proyecto.

Sinceramente, no tengo ninguna duda de que elegir al cineasta Eli Roth (básicamente conocido por sus películas con altas dosis de violencia física y baño de sangre) fue una mala decisión. En ningún momento logra entregar una visión convincente (ni siquiera parcial) sobre el proyecto que tenía entre manos. Además de ayudar a escribir el guión, también trabajó aquí como director y realizó uno de los peores trabajos de su carrera (hasta ahora). Roth no tenía el más mínimo sentido de la creatividad para trabajar en este proyecto, que merecía algo más decente.

Borderlands incluso logra ofrecer entretenimiento genuino aquí y allá (más por su aspecto técnico que por sus chistes aburridos), pero todo es demasiado repetitivo para ser visto como algo más grande de lo que realmente es (y la trama de la película habla por sí sola). En términos narrativos, quizás lo más interesante sea el dinamismo del proyecto (que por momentos es muy similar al dinamismo del juego), pero incluso esos momentos son demasiado genéricos para ser recordados. Unas gotas de solidez en medio de un mar muy poco profundo.

Sinopse: Uma improvável equipe (totalmente desorganizada, e formada por integrantes desajustados) une forças para enfrentar uma missão perigosa: salvar uma garota (que é a filha da criatura mais poderosa do universo) desaparecida, que detém a chave para um poder inimaginável que pode mudar o curso da história como nós a conhecemos.

Assim como as adaptações cinematográficas baseadas nas histórias em quadrinhos, as adaptações cinematográficas baseadas em títulos de vídeo games parecem sofrer um mal incomum: uma falta aguda de criatividade. Isso fica cada vez mais evidente quando projetos como este recebem uma luz verde (e um grande orçamento) dos grandes estúdios para serem filmados, porque é mais do que óbvio que há fatores extremamente limitantes dentro de suas respectivas narrativas. Eis aqui outro exemplo clássico de como não fazer cinema usando vídeo game como base do seu material.

Por mais “irônico” que tudo isso possa parecer (até mesmo para mim que eu estou escrevendo esta crítica neste exato momento), eu acredito que a pior parte dessa adaptação não é à sua própria estória em si (que tem até alguns poucos pontos relativamente interessantes), mas sim, o que os roteiristas decidiram fazer com ela. A trama não traz nada com elementos complexos, então, o esperado era que o filme conseguisse condensar os seus elementos narrativos dentro de um desenvolvimento simples, porém eficiente. No entanto, nem de longe isso acontece aqui. Tudo é uma confusão.

Apostando em uma abordagem extremamente caótica e irritante, a estória tem uma narrativa constantemente instável (a ponto de causar frustração em muitos momentos), com péssimas decisões em relação à sua construção, bem como uma essência muito embaraçosa, e que certamente conseguirá constranger até mesmo os mais fiéis defensores deste jogo (porque simplesmente não há argumentos para defender o que foi feito aqui). Eu realmente não consigo entender como algo que já tinha receita pronta para ser um sucesso, se torna em um fracasso quase instantâneo em outra mídia.

Desfilando um conjunto de personagens nada carismáticos, unidimensionais e totalmente sem química entre si dentro de um roteiro pessimamente escrito, não há muito o que um elenco estrado consiga fazer. Nem mesmo nomes como Cate Blanchett e Jamie Lee Curtis foram capazes dar oferecer alguma decência para este projeto, que mais parece uma explosão de luzes e cores em um ritmo frenético que a todo momento apela para o senso nostálgico do público que já conhece o jogo (como se o projeto implorasse por uma atenção desse público mais cativo e talvez mais compreensível).

Em síntese, absolutamente ninguém dentro desse elenco estelar consegue fazer algo digno de ser mencionado como uma performance minimante boa. Tudo é raso, artificial e preocupante, que à única coisa que eu consigo me perguntar é como o tempo de duração deste projeto conseguiu chegar aos seus 90 minutos. Repleto de clichês do gênero, o filme tenta criar uma identidade própria a partir de suas próprias peculiaridades, mas tudo é explorado das piores maneiras possíveis. Sendo assim, tudo o que pode ser visto na tela é um projeto extremamente mal sucedido... Do início ao fim.

Fazer um filme em live-action requer um trabalho minucioso de todos os envolvidos. Não se trata apenas de escalar os melhores nomes dentro de um elenco para dar vida aos personagens, se trata como escrever suas respectivas histórias dentro de uma narrativa que consiga ser coerente com o que está sendo construído. Mesmo acertando em elementos como a caracterização de seus personagens (o que acaba sendo apenas um detalhe técnico, mas ainda importante), o dano central reside nas subtramas que deveriam manter esses personagens de pé e sendo relevantes para esse projeto.

Sinceramente, eu não tenho a menor dúvida que escolher o cineasta Eli Roth (conhecido basicamente pelos seus filmes com altas doses de violência física e banhos de sangue) foi uma péssima decisão. Em nenhum momento ele consegue entregar uma visão (nem mesmo algo parcial) convincente sobre o projeto que ele tinha em mãos. Além de ajudar com à escrita do roteiro, ele também trabalhou como diretor aqui, e entregou um dos piores trabalhos de sua carreira (até então). Roth não teve o menor senso de criatividade para trabalhar com esse projeto, que merecia algo mais decente.

Borderlands - O Destino do Universo Está em Jogo até consegue entregar algum tipo de entretenimento genuíno aqui e ali (mais pela sua parte técnica do que pelas suas piadas sem graça), mas tudo é repetitivo demais para ser encarado como algo maior do que ele realmente é (e à própria trama do filme fala por si só). Em termos narrativos, talvez a coisa mais interessante seja o dinamismo do projeto (que às vezes se assemelha muito ao dinamismo do jogo), mas mesmo esses momentos são genéricos demais para serem lembrados. Algumas gotas de solidez em meio a um mar bem raso.