El estilo de: Ishana Shyamalan.

ESP: Esta película es un desastre por muchas razones. En mi opinión uno de los problemas más grandes que tiene esta cinta es que se siente apresurada. Y personajes que podrían haber sido muy interesantes terminaron siendo unos cascarones vacios. personalidades en 2D que no llegan a nada. Y el suspenso también sufre gracias a esto. En ningún momento me preocupo la seguridad de ninguno de los personajes, incluso en los momentos de mayor tensión se sentía que querían llegar a la siguiente escena para poder dar mas información sobre el extraño mundo en el que se encontraban los personajes, información que usualmente, terminaba por ser irrelevante: como las supuestas reglas que debían seguir para que las criaturas no se los comieran. En lugar de perder el tiempo con eso, me gustaría que exploraran la desaparición del carro al principio, cuando la prota se pierde en el bosque. Eventualmente nos enteramos de que no es un bosque mágico ni nada por el estilo. Es solo un bosque en el que casualmente habitan criaturas resentidas con los humanos. Entonces como desapareció el carro? Eso es una pregunta que jamás tendrá respuesta. La protagonista nunca hace esa pregunta dentro de la fortaleza. Parece como si se le hubiera olvidado por completo. En lugar de correr hacia el lago, al final tuvieron que correr hacia el carro para irse por donde vinieron con aire acondicionado, pero no, porque esta película es un asco. Sin embargo, a pesar de que la historia no se sostiene, los personajes son fáciles de olvidar y no hay ni una solo línea memorable, la personalidad de la directora me pareció interesante. Aquí no hay cortes rápidos. Para dirigir nuestra atención, la hija de M Naight. Shyamalan. Juega con la profundidad y el enfoque. Se enfocando a la persona que esté hablando y todo lo demás se ve borroso, fuera de foco. Esto esta cool, el juego con el enfoque sustituye aun clásico corte para ir a enfocar a la persona que habla en primer plano o algo así. Pero el movimiento de cámara que me enamoro fue este: La toma comienza mirando a la prota (dándole la espalda al cristal, rompiendo una de las estúpidas reglas sin ninguna consecuencia...) y la cámara gira sobre su propio eje 360 grados revelándonos una criatura en el bosque para luego terminar donde comenzó, solo que ahora algo cambio. La prota no está en el sofá, sino parada. Esto sucede una vez más cuando la prota y la señora están en peligro. Aquí la cámara panea lentamente hacia arriba, nos revela una criatura y luego regresa a donde comenzó pero ya nada es igual. La señora le está tapando la boca a la prota y esto es simplemente brillante. El groso de la película es bastante estándar, pero cada vez que Ishiana Night Shamalan poetizaba con la cámara me atrapaba. Solo en esos momentos sentía que la película estaba viva, que la directora tenía algo que decir. Quizá su estilo es lo que evito que me fuera a hacer otra cosa mientras dejaba la peli como ruido blanco de fondo. Y creo que por eso ya estoy esperando una nueva peli de esta chica. Solo espero que no sea la secuela de esta historia.